Pensemos en una manifestación
contra el terrorismo de ETA. Miles y miles de personas en las calles, venidas
desde todos los rincones de España. Niños, mujeres, hombres, familias enteras.
Jóvenes y no tan jóvenes. Por desgracia no hay que echarle mucha imaginación,
pues lo hemos vivido, con demasiada frecuencia, hasta hace no mucho.
Imaginemos ahora las portadas de
la prensa al día siguiente. Cómo ignorar e invisibilizar un hecho así, ¿verdad?
¿Qué se hubiera dicho de un medio que no le daba importancia a ello?
Hablemos ahora de la manifestación
del pasado sábado en Madrid contra la violencia de género (dato: solo en los
últimos 12 años ha habido más mujeres víctimas de violencia de género que
víctimas de ETA en toda su historia). Miles y miles de personas en las calles,
venidas desde todos los rincones de España. Niños, mujeres, hombres, familias
enteras. Jóvenes y no tan jóvenes.
¿Cuáles son las portadas de los
principales periódicos al día siguiente? De los cinco más vendidos (El País, El
Mundo, La vanguardia, el Periódico de Cataluña y ABC), en solo dos aparece la
manifestación a gran tamaño en la portada. En un tercero aparece una pequeña
reseña, tan pequeña, que incluso la noticia “Taiwán no proclamará la
independencia” ocupa mayor espacio. En los otros dos pueden buscar y rebuscar,
pero no encontrarán NADA. (http://kiosko.net/es/2015-11-08/general.html).
Pero la cosa va mucho más allá. No
mencionaron la manifestación, no. Sin embargo, días después, en uno de esos
medios, sí que publicaron un artículo en el que se tachaba a la misma,
literalmente, de “absurda manifestación”. ¿Los argumentos? Entre otras perlas,
que la violencia de pareja (así es como llama el individuo a la violencia de género)
es algo privado que siempre ha existido vete tú a saber por qué. Vamos, que nos
crucemos de brazos, que no hay na que hacer y que dejéis ya de dar la lata,
locas histéricas.
No es la primera vez que vemos cómo desde la prensa se ponen piedras en el camino de la lucha contra la violencia de género. Por eso, y para que mucha gente sea consciente de cómo se trata en este país este tema, he recopilado algunos de los casos más llamativos. Cuándo alguien se pregunta cómo puede ser que hoy hayan matado a otra mujer, cómo es posible que no se acabe con esto de una vez… ¿Que cómo es posible? Pues, entre otras muchas cosas, porque tenemos una prensa que, en demasiadas ocasiones, lo suaviza, lo justifica y lo fomenta.
¿Un hombre irá 9 meses de cárcel
por llamar yonqui a su ex pareja? Qué locura, ¿no? Si es que ya montamos el lío
por cualquier chorrada… Ah, espera, que si leemos la noticia completa resulta
que:
La
insulta, la coge del cuello y la tira al suelo. Pero ellos eligen como titular “a
la cárcel por llamarla yonqui”. Bravo.
¿"Muere"?
¿"Cae"? ¿Ella sola? ¿"Detienen a un hombre"? ¿Al primero que pasaba por allí? ¿La noticia en la sección sucesos? Qué despropósito…
“Detenido por amor”. Saltó la
valla y entró en la casa de su exnovia. No era la primera vez que lo hacía
desde que rompieron. Qué romántico. ¿Y ella va y lo denuncia? Las mujeres hoy
en día es que somos unas desagradecidas. ¿Qué pretende? ¿Que acepte la ruptura
y no se cuele en su casa cada vez que le da gana? ¡Pero si eso es una prueba de
amor, tonta! ¿Qué hay más romántico que eso? Pobre chico, qué injusticia. Él
solo está enamorao…
“Una pareja normal”. Él no la
dejaba salir porque no quería estar mucho tiempo solo. La tarde anterior era la
primera vez que ella podía quedar a solas con una amiga. Vamos, lo que viene
siendo una pareja de lo más normal. Todo el mundo sabe que lo normal cuando
tienes pareja es no poder salir de tu casa. Es algo muy normal y muy romántico,
casi tanto como lo de saltar vallas y entrar en casas ajenas.
TOMA YA. Y saludaba todas las
mañanas, ¿verdad?
Si ya de por sí aterra la actitud de parte de la sociedad ante la violencia de género, peor aún es que los medios lo reproduzcan como si nada. Pudiendo condenar y concienciar, en muchos casos eligen el morbo, la justificación, y acaban disfrazando asesinatos, haciéndolos pasar por amor. Un poquito de cabeza, ¡por favor!
Impresionante como nos hace reflexionar. No nos damos cuenta de lo que leemos, escuchamos y hasta decimos.Necesitamos leer muchos artículos como este para aprender a ver el maltrato y dejar de encubrirlo con frases tan añejas, rancias y llenas de peligro como "eran una pareja normal", "parecía un hombre tan educado", "la quería tanto que no podía soportar la idea de perderla"...
ResponderEliminarCreo que es bueno usar artículos como este para educar y abrir los ojos a las nuevas generaciones si queremos cambiar nuestro mundo y su futuro. Está en nuestras manos.